Hoy tengo la certeza, de que aquellos ex borrachos que me recibieron con una taza de café en un humilde garaje en Medellín, NO han bebido.
Son 706 días, los cuales no he tenido que volver a empuñar una copa, 706 días despierto en el mundo del sentir. Hoy siento decirles Gracias, Gracias, Gracias. Son muchas las razones por que dar gracias, la primordial, Gracias por no beber hoy. No me logro imaginar, ¿que hubiera pasado conmigo, si tú hubieras bebido hoy?. ¿Quien me hubiera recibido? ¿Quien me hubiera pasado el mensaje?. Cuatro llaves cargaba en mi bolsillo el día que llegué a la Frater, La llave de la cárcel, La llave de un psiquiátrico , la llave de una cama de hospital, y la más eminentes de las llaves, La llave de la muerte.
Ustedes, EX borrachos como yo, compañeros del sufrimiento, desahuciados de la vida, EX esclavos de su majestad el alcohol, a ustedes Gracias, Gracias, Gracias por no beber. Día tras día, con el mínimo grado de voluntad que poseía en ese momento, me fueron liberando poco a poco, y quitando cada una de esas llaves, una a una. Hoy no he bebido, y Hoy no beberé, porque mi vida, está al cuidado de un Dios amoroso como lo concibo y bajo la autoridad de un sin número de ex borrachos como ustedes. La deuda que tengo con ustedes, es impagable, solo puedo corresponderles de la misma forma que lo hicieron conmigo, NO beber hoy.
Aunque lejos me encuentro, los recuerdo noche tras noche. Tengo la certeza que las puertas de ese garaje en la carrera 80 siguen abiertas, tengo la certeza de que no han bebido. Hablo mucho de ustedes. Sin duda, son únicos. El ADN de la frater es mágico a la verdad, los recuerdo mucho, uno a uno, incluso a aquellos que en mi arrogancia, soberbia y altivez de aquel tiempo, decía que no tenían nada que aportarme. Todos, absolutamente todos, fueron determinantes para mi. Veo hacia atrás, y puedo observar, que si alguno de ustedes hubiese faltado, no tendría las herramientas hoy para vivir. Gracias, Gracias, Gracias. Uno fue el que entró por esas puertas el 30 Junio 2023, Otro SOY ahora, gracias al no beber y a su valioso cuidado.
Espero por su puesto, que esta experiencia espiritual en la que nos encontramos, nos permita vernos nuevamente, nos permita compartir nuevamente, pero si eso no llegara a pasar, tengo la certeza de que nunca olvidaré cada uno de esos primeros días de mi llegada al mundo de los despiertos.
Hoy, quiero despedirme no sin antes recordarles algo que me repetían constantemente ustedes, ! Hoy no se bebe pase lo que pase, suceda lo que suceda, con o sin, ¡No se bebe hoy!.
Hoy, me levanto con la certeza, de que lo único cierto y real que tengo, es que no he bebido, lo demás, solo es circunstancial.
Hoy, me levanto apreciando el don de no beber, un don recibido sin merecerlo, otorgado por algo muy superior a mi mismo, manifestado a través de ustedes.
Hoy, que es finalmente lo único que tengo, solo quiero decirles, Gracias , Gracias , Gracias.
Pido al Dios que me tiene sin beber, que les de ánimos, les de fortalezca, les conceda la serenidad, les inunde de paz y humildad, y por sobre todas las cosas, que unidos, puedan tener esa puerta abierta, todas las noches, para que muchos como yo, que hoy siguen sufriendo, puedan llegar y experimentar el amor altruista que cada uno de ustedes sabe dar.
Les amo y les bendigo. Jhon.
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